La histórica decisión, impulsada por protestas masivas, encuentra eco en todo el mundo: en Francia, la activista Henda Ayari se quita el velo en vivo como gesto de libertad.
Teherán / París, 2 de junio de 2025 — La reciente suspensión de la ley que obligaba a las mujeres a usar el hiyab en Irán ha generado un impacto global. La medida, anunciada por el Consejo de Seguridad Nacional iraní, responde a meses de intensas manifestaciones encabezadas por el movimiento “Mujer, Vida, Libertad”, que ha exigido mayores libertades individuales y el fin de las restricciones impuestas sobre los cuerpos y vidas de las mujeres.
Aunque el gobierno iraní ha señalado que se trata de una decisión temporal mientras se revisa el marco legal, la suspensión representa un respiro significativo para millones de mujeres que han enfrentado durante décadas sanciones por no cubrirse el cabello en público. Las penas han incluido multas, detenciones e incluso violencia por parte de la llamada "policía de la moral".
La reacción internacional no se hizo esperar. En Francia, la activista y escritora Henda Ayari protagonizó un gesto simbólico durante una transmisión televisiva en horario estelar: se quitó el velo en vivo, declarando que “el velo impuesto no es una elección, es una prisión”. Su acción fue ampliamente difundida en redes sociales y celebrada como un acto de solidaridad con las mujeres iraníes.
Organismos de derechos humanos han calificado la suspensión como un paso alentador, aunque frágil. “Este es un momento histórico, pero aún queda mucho por hacer para garantizar que las mujeres en Irán puedan ejercer plenamente su autonomía”, declaró Amira El-Khaldi, vocera de Human Rights Watch en Medio Oriente.
Desde las protestas que estallaron tras la muerte de Mahsa Amini en 2022, detenida por no portar “adecuadamente” el velo, el país ha sido testigo de una movilización sin precedentes de mujeres jóvenes, estudiantes y activistas que desafían abiertamente las normas conservadoras. La consigna “Mujer, Vida, Libertad” se ha convertido en el lema de esta nueva ola de resistencia.
Por ahora, el futuro de la ley del hiyab en Irán permanece incierto. Sin embargo, el simbolismo de esta suspensión y las reacciones que ha provocado dentro y fuera del país sugieren que la lucha por los derechos de las mujeres en el mundo islámico está entrando en una nueva etapa.
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